En 2013 abre Punk Bach en el Paseo de la Castellana de Madrid. Un restaurante que se cubre bajo un concepto de restauración vanguardista –al estilo de lo que se lleva en el Soho neoyorquino– y se autodenomina como “una brasserie ilustrada y canalla”. La vestimenta del personal corre a cargo de Lander Urquijo, de la sastrería The apartment. Por otro lado, los detalles de bisutería que lucen con look punk son de Aristocrazy. Punk Bach es un local de contrastes en el que coexisten lo moderno y lo clásico, lo raro y lo funcional.
Desarrollamos la identidad completa del restaurante, a base de composiciones tipográficas en blanco y negro e ilustraciones. Partiendo de un naming que conceptualmente ya genera contraste (en consonancia con la idea de equiparar lo clásico y lo moderno) se desarrolla toda su línea gráfica y comunicación. Realizamos el diseño de: cartas, tapetes, etiquetas de vino y cerveza, posavasos, packaging take away, piezas de comunicación, etc.
